Antes de analizar el sistema de riego de un espacio a crear, es imprescindible conocer el caudal y la presión de agua disponible, para que la instalación sea la más adecuada y conveniente.
Después de la medición del terreno, e indicación del tipo de suelo procederemos a incluir todos los elementos que interfieran positivamente en el sistema de riego con el fin de realizar según el proyecto, la medida más idónea y efectiva para llevar a cabo su desarrollo, reduciendo en lo posible el consumo de agua, sin perder efectividad en nuestras espécies vegetales.